El restaurante mexicano que deja de vender cierto refresco de Cola #Oaxaca

l restaurante Los Danzantes anunció que dejará de vender bebidas de la marca Coca-Cola en su sede en Oaxaca, “por el bien de nuestros huéspedes, amigos y colaboradores”. El grupo tiene otro restaurante en Coyoacán, Ciudad de México, el cual no se unirá —por el momento— a esta medida.

Los Danzantes Oaxaca detalló que en vez de Coca-Cola darán una bebida de nombre Zegacola, elaborada en Santa Ana Zegache, Ocotlán de Morelos, Oaxaca, y que está hecha con componentes naturales como aceite de naranja, aceite de lima, aceite de nuez moscada, aceite de cilantro y cafeína, entre otras.

Este es el comunicado íntegro difundido por Los Danzantes este 1 de marzo:

En entrevista telefónica con HuffPost México, Jaime Muñoz, dueño del restaurante, dijo que el hecho de cortar lazos con la compañía es similar a “una revolución al monopolio y la industrialización”, además de cuidar la salud de los comensales y, muy importante, “promover los productos locales y artesanales”.

Las bebidas de sabor también se irán. En su lugar, se quedarán los refrescos artesanales Búho Soda, hechos en Guadalajara. Y en cuanto al agua natural, el restaurante ofrecerá Agua Inda Pura, que de acuerdo con la descripción de su sitio: “somos los Pueblos Mancomunados, un lugar único en el mundo, catalogado como uno de los espacios naturales mejor conservados de México, un paraíso puro, custodiado por la maravillosa Sierra Norte de Oaxaca; donde el cielo deja en las montañas gotas de rocío como valiosos regalos”.

HP: ¿Cuál fue la reacción de Coca-Cola ante su decisión de ya no vender sus productos?

Jaime Muñoz: Yo creo que ni se han dado cuenta ni tampoco les ha de importar. Son globales.

De acuerdo con Muñoz, esperaron a terminarse todo el inventario que tenían para empezar a ofrecer los productos mexicanos.

HuffPost buscó a Coca-Cola para conocer su opinión al respecto, pero no se recibió respuesta al momento de publicación de este texto.

La industria refresquera en México y el mundo enfrenta medidas gubernamentales para reducir el consumo entre las personas, pues su alto contenido de azúcar pone en riesgo la salud de las poblaciones.

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